Empezamos a vivir, lloramos y no sabemos por qué,
y nos cuesta abrirnos al mundo, empezamos a escribir,
y vemos las cosas como deberían ser, no puede entenderlo nadie,
paso a paso, tropezón tras tropezón, avanzamos,respiramos,
acertamos, pero desgraciadamente lo que mas cuenta son los fallos.
Nos tienta el diablo, ya se nos quemaron las alas,
son mentira todos los versos, nos crecen cuernos y rabo.
No conocemos a nadie, perdemos el tiempo,decimos de más,
sin sentido, con maldad, para dañar, creímos que acertamos,
perdimos el compás.
Gastamos todo lo que no tuvimos, peleamos contra nuestra sombra,
maltratamos lo que más queremos, rompemos los espejos...
Vagamos por las calles, tomamos copas hasta tumbarnos,
fumamos sin miedo, sangramos por besos que merecieron la pena esa noche.
rompimos la luna en cachitos y nos dimos a la fuga, robamos vidas, esa noche fuimos los malos.
Perdimos o creímos perder el norte, no supimos cual camino era el nuestro,
lloramos demás y creemos follar de menos, se murieron nuestros hijos,
tuvimos ideas de secuestros, pudimos gobernar el mundo pero creamos uno propio,
soñamos todo lo que pudimos, y reímos un poco menos de lo merecido,
sufrimos por cosas que no lo merecían, y muy a menudo vivimos en los recuerdos,
tiramos de las riendas hasta romperlas y fuimos arrastras, sin pedir más,
le guardamos rencor al pasado y nos trastornó este futuro banal.
Sí mi querido Arturo. Leí este poema, este gran poema tan lleno de poesía como de aciertos. Te escribí un comentario porque no pude resistirme a esta visión tan inusual, me atrevería a decri, y sin embargo tan certera. Lo bueno, es que te quedan muchos recuerdos que crear.
ResponderEliminarVeo que me he quedado atrás en tu prolífera creación. Voy a ver si consigo ponerme al día.
Hasta hoy, déjame decirte que me quedo con este poema en mi retina y en mis favoritos.
Un besazo poeta.