lunes, 26 de marzo de 2012

Soy un niño perido que ha crecido en el olvido...

Las sombras se hacen cada vez más grandes, lo abarcan todo,
se hacen con el control de mi vida,
las palabras se hacen un nudo en mi boca,
mis musas me han abandonado, y ya no me queda nadie a quien llorar,
siempre escribo de lo mismo, siempre estoy solo,
sigo siendo yo pero, en el fondo sé que he cambiado en todo,
ya no me enamoro, ya no busco nada más allá que tres caricias y un polvo,
voy vagando por las calles, soy ese extraño,
me siguen voces de gente que me ve pero me hago el sordo.

Voy a jugarmela otra vez, no voy a levantar,
tengo más ganas de perder que de ganar,
he perdido mi fe, he perdido mi camino de vuelta a casa,
y firmo con otro nombre, voy por la calle, solo, alocado como las balas,
no me sirven de nada las charlas, las miradas, o palmadas en la espalda,
no hay compasión, no hay amistad, no hay amor, ni se esperan cosas distintas.

Todo es igual que siempre,
los mismos ruidos en mi casa, las mismas caras,
los mismos errores, todo escrito con la misma tinta,
mi imaginación a muerto a manos de mi soledad,
sigo teniendo esas ganas de vivir, pero alguien las quiere enterrar,
creo que soy yo mismo, esto debe de ser una pesadilla,
he perdido la cuenta de todo, intento cazar al vuelo sonrisas y lágrimas escondidas...

Hace tiempo que no tengo a nadie,
o que no escribo de otra persona,
ya no tengo secretos,
y hace mucho tiempo que no tengo un folio en blanco delante,
ya no recurro al amor para escribir, ni fumo para no llorar,
hace tiempo que la luna no se asoma a mi ventana,
hace tiempo que no me importan las horas, ni la pena o la gloria,
he perdido mi alma, mis principios y mi cartera,
ya no hago promesas pues tengo un millón rotas en el cuello,
no voy hasta el final cua do algo parece perdido,
me doy por vencido y disfruto de las vistas que haya desde el suelo...

Me ando buscando por algún motel de carretera...

No hay comentarios:

Publicar un comentario