jueves, 16 de diciembre de 2010

¿Y que hago aquí?


Tus manos traviesas nunca se olvidan, se perdieron las cartas que te escribí y los "te quiero" que creaban silencios incómodos, confundí el marrón de tus ojos con el negro futuro que me esperaba riendo sin ti.

Estuve lejos, extremadamente lejos, sin poder tocar tus dedos, sin mirar tu cuerpo, sin aquellos besos que tanto me gustaban y se disipó el olor de tu cuerpo, ese que me tiraba horas enteras oliendo, recorriendo tu cuerpo entero, eché tanto de menos esas tardes enredados en la cama, jugando con nuestros cuerpos, sudando nuestros sueños, secuestrándonos, eché tanto de menos escribir deseos en el vaho de los espejo.

Eché de menos las broncas que teníamos, tus lágrimas en mi espalda después de ellas, las promesas que hicimos para cuando fuésemos grandes, echaba de menos esa racha de buena suerte y los bailes que nos echábamos con la felicidad...


Y ahora que no estoy...

No hay comentarios:

Publicar un comentario