lunes, 27 de diciembre de 2010

Para, tómate un respiro...



Abrí los ojos, y entre bocanada y bocanada de aire la ciudad envejeció mil años,
ese día me sentía apartado, como fuera del mundo, pero me repuse y volví de nuevo.
Se oían cosas extrañas, la ciudad respirando, las bicicletas paradas, los llantos, risas, y otros amores de extrarradio... mi camino fue truncado desde bien atrás,
nací peor de lo imaginado, crecí entre los repiqueteos de un campanario perdido en el campo, donde las águilas se aprovechaban de los cadáveres que dejaba el trabajo,
donde los niños jugaban descalzos, y la sangre era un aroma corriente, mientras que el agua se evaporaba de las manos.
De nuevo respiro, tranquilo, ando pendiente de mis reacciones, distante, observando lo que me depara el futuro, que después de todo no está tan lejos, ando, como esperando algo, casi parado pero no aparto la vista del cielo e imagino que me veo como un pájaro, tan pequeño desde ahí arriba, y de nuevo me pierdo, me pido perdón por no estar atento, me perdono y sigo mi camino.

La verdad, el amor, el deseo.
Estoy fuera de linea, esperando el tren que al final del día no llega, pierdo.
Gano confianza en mí mismo y miro la distancia que me separa del suelo desde la cornisa, y vuelvo a ganar confianza, apoyo un pie en la nada y... ando, cansado, con los hombros bajos, el sol me calienta la espalda.
Abro los ojos y cojo una gran bocanada de aire, todo para mí, sin dejar nada, el quitiquiclack de una maquina de escribir me devuelve a mi casa, a mi música, por mi ventana se me ve mirando al horizonte sentado en la cama como esperando como esperamos al mañana... lo siento por las prisas pero el día acaba de empezar, repaso lo que quiero, y por lo pronto empezar bien lo que me queda de vida.

1 comentario:

  1. "...Repaso lo que quiero...." Tienes grandes momentos en este texto. Olores inconfundibles, imágenes increíbles que nos adentran en tu sentir y nos hace sentirlo igual.
    A mi el reloj del horno me devuelve a mi realidad y repaso lo que quiero, que no siempre coincide con lo que debo, pero que en este caso, ha hecho diana. Doble diana. Me tomé un respiro y leí tus entradas. Todas tan llenas de ella...Leí ésta y justo sonó la campana. Hoy repaso lo que quiero y lo que quiero es disfrutar mañana de tu compañía y que te guste el asado.
    Un besazo poeta

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